Hola, hoy voy a contarte mis experiencias en clases de dibujo. Otro día hablaré sobre mis estilos de dibujo y daré algunos consejos por si quieres aprender a dibujar :).
Bien, empecemos.
No sé si lo sabías, pero yo dibujo desde muy pequeña, tengo fotos y vídeos de los cuatro hasta los seis años dibujando.
Me ha resultado entretenido y ha sido mi forma de expresarme cuando me era difícil descargarme. Dibujaba las paredes de bebé y también sobre hojas que mi padre me traía de su trabajo. He recibido apoyo desde muy joven por ende, he ido a un curso de dibujo a partir de los siete u ocho años, en un sitio no muy lejos de mi casa. Ahí me sentía cómoda y también era muy... ¿Consentida? No sabría cómo decirlo.
Iba cuatro horas semanales y solía tener hambre, por lo que pedía para comer cada vez que iba, ahora me da vergüenza recordar que incluso llegaba a pedir por gula.
Recuerdo un dibujo que hice, fue de los primeros, dibujé a las chicas super poderosas ya que era mi serie favorita (Y sigue siéndolo, Lol.) y posterior a ello, le decoré el fondo, bastante creativo, mi profesora afirmó que tenía muchísima imaginación.
Las clases eran divertidas, había también una señora que pintaba en óleo y me decían que era muy inteligente por saber las representaciones tridimensionales.
Un día me agoté de ir, no recuerdo si era porque debía salir y quería quedarme en casa o si me había saturado.
En el año 2017 volví a ir a dibujo, debo admitir que ha sido el mejor curso de dibujo que pude haber ido, me alegro mucho haberlo aprovechado y no faltar nunca a sus clases.
No fue en el mismo lugar, era en el centro de mi ciudad natal y con un precio bastante elevado. Recuerdo el día que me registré, pensaba que iban a salir un poco desalentadoras, pero no fueron así.
Conocí a una profesora muy buena, dibujaba excelente lo que te puedas imaginar, desde caricaturas hasta realismo, no pintaba pero tenía un montón de técnicas de las cuales aprendí algunas, incluso he podido dibujar un gato realista con una técnica llamada "Dibujo al revés".
Lo que me gustaba de este ambiente era que la única regla "No dejar de dibujar", creo que nunca usé tan poco mi celular, solamente para buscar una foto o imagen para replicar. Mientras se escuchaba la misma Playlist de Gustavo Cerati y que hasta el día de hoy me recuerdan esas clases de esos sábados a la mañana.
Me daba lástima que sean sólo una vez a la semana porque la pasaba demasiado bien, la profesora traía galletitas y dibujábamos.
Recuerdo que en ese tiempo no tenía un lápiz de dibujo y siempre a las salidas de clases me robaba alguno que dejaban tirado.
Recomendación: Los lápices BIC que son color verde agua NO los usen para dibujar, son muy suaves y debes hacer un esfuerzo para que sea más oscuro.
En 2018 ya con 15 años, quise volver a dibujo y más que nada, ese lugar que dejé de ir porque mi madre discutía con los dueños del lugar porque mensualmente aumentaban la cuota.
Debo agregar que las clases estaban situadas en una librería, básicamente, debía entrar a la parte del mostrador y subir unas escaleras que parecían ser muy frágiles hasta el segundo piso que también parecía tener la misma fragilidad.
Bien, en 2018 volví a ir al mismo lugar donde iba a los ocho años, con la misma profesora.
Debo decir que la experencia no fue tan agradable, eran dos veces a la semana (Creo que martes y jueves), durante la mañana, a pesar de que era demasiado cercano, no podía ir sola por cuestiones de seguridad, la profesora no le convencía mi forma de dibujar y tampoco aprobaba las técnicas de dibujo aprendidas en el otro curso.
No me agradó la experiencia, le comentaba a mi pareja y a él le encantaba lo que dibujaba, le parecían dibujos de profesional, me costaba mirar de la misma forma.
Terminé abandonándolo unos meses más tarde, el horario de la tarde (del cual he ido dos veces) me lo terminaba dejando como un remordimiento porque decían todo el tiempo "Clase de recuperación" en una entonación de desagrado, bueno, supongo que esta parte fue generada por alguna sugestión debido a los malos recuerdos.
Tardaba una hora en hacer un dibujo que tuve que hacer bien en diez minutos porque a la profesora no le parecían lo suficientemente buenos, incluso ha llegado a perder la paciencia.
Bueno, hablé con mis padres diciéndoles que no sentía que dibujaba con las mismas ganas y no he vuelto a ir.
En conclusión, si quieres ir a un curso de dibujo, no te enfoques a dibujar en algo, dibuja cualquier estilo de dibujo hasta que encuentres tu estilo, encuentra un profesor como la que tuve en el curso del 2017.
Deja que te enseñen técnicas, gasta dinero en materiales de dibujo porque si quieres realmente aprender a dibujar, vale totalmente la pena.
Deja volar tu imaginación si te hacen alguna técnica de dibujo creativo y no boludees a los profesores, porque en su mayoría disfrutan enseñar y valoro eso de muchos profesionales.
Y no usen lápices BIC.
Esto ha sido todo, espero que hayas disfrutado de la lectura, perdón por mi mala redacción. Volveré a postear en el blog cuando tenga ganas de escribir.
Saludos :).
~Salamelín.
